Pensaba abrir este blog con una presentación que expusiera en qué consiste "la educación diferenciada", pero la carta que envió Mayte Dassoy y que publico el Diario de Mallorca el 5 de julio de 2007, es el mejor exponente de este método de enseñanza.

LA EDUCACIÓN DIFERENCIADA NO ES UN INVENTO MALLORQUÍN

El pasado 14 de junio el abogado Marc González publicó un artículo en este diario con la siguiente afirmación: "La educación diferenciada se basa en resaltar las diferencias entre hombres y mujeres, luego es innegable que las promueve", en un texto en el que se hacía referencia a los colegios que muy pronto serán una realidad en el Parc Bit. Conozco bien el modelo de educación diferenciada que se va a implantar en estos nuevos colegios y puedo asegurar que su leitmotiv no es promover las diferencias entre hombres y mujeres. Su objetivo principal es ofrecer una educación integral que sirva de estímulo para el desarrollo de las aptitudes y actitudes personales, tanto pa­ra los, chicos como para las chicas.
Por otro lado, también se tendría que tener en cuenta que el modelo de educación diferenciada no es algo nuevo. Los que critican dicho modelo dan la impresión de que en el Parc Bit va a aterrizar una especie de platillo volante que va ofrecer un tipo de enseñanza que jamás ha visto el ser humano, un ovni que romperá moldes en la historia de la enseñanza mundial. Y todos sabemos que no es así, de hecho tengo muchos familiares y amigos que han cursado la EGB en colegios no mixtos de Mallorca y no les ha pasado nada grave. Y de es­to no hace mucho tiempo, no han pasado "decenios" como señala Marc González en su artículo. De hecho estoy convencida de que algunos de los que ahora dicen; que no les gusta este modelo han sido estudiantes en colegios no mixtos y, a buen seguro, hoy hablan de las bondades del centro escolar por el que pasaron.
Sería perfectamente comprensible el temor de muchos al modelo de educación diferenciada si éste fuera aquel en el que a los chicos se les enseña matemáticas, historia, lengua y un largo etc, mientras que las materias del curriculum de las chicas fueran otras encaminadas a una formación especializada únicamente en tareas doméstica. Efectivamente, dicha enseñanza sí se podría considerar claramente discriminatoria y segregacionista, ya que no ofrecería las mismas oportunidades a chicos y chicas para ocupar los mismos puestos de trabajo.
Sin embargo, no es éste el modelo de enseñanza diferenciada por el que apuestan, también en los colegios públicos, países como Francia, Reino Unido, Suecia, Finlandia o EE.UU, por poner algunos ejemplos, para dar respuesta a los graves problemas con los que se encuentra el sistema educativo de dichos países, problemas que no afectan sólo al ámbito académico, es decir, al fracaso escolar, sino también a aquellos que atañen al comportamiento del alumnado, como son los casos de violencia escolar entre los propios estudiantes o con el profesorado.

En España en la actualidad hay más de 150 colegios que ofrecen educación diferenciada, por lo que no somos pioneros en ningún sentido ni podremos presumir de ello.

Como he comentado, en el caso de
Mallorca, durante muchos años la educación no mixta ha sido una realidad en muchos colegios de reconocido prestigio (Montesión, San Francisco, Madre Alberta, etc), dedicados a la formación de chicos o chicas. Algún lector podría pensar: claro, colegios dé curas y de monjas, por eso de que cuanto más separados estén niños y niñas mejor. Pues no, también desarrollaron este modelo colegios públicos, como el IES Ramón Llull. Y repito, no se trata de un gran descubrimiento mallorquín. En España en la actualidad hay más de 150 colegios que ofrecen educación diferenciada, por lo que no somos pioneros en ningún sentido ni podremos presumir de ello.
Fue en 1970, con la Ley General de Educación, que se generalizó la escuela mixta, un modelo de educación igualmente válido. No hay evidencias científicas que verifiquen que un sistema sea mejor que el otro, de hecho las escuelas rurales han sido toda la vida mixtas y han funcionado muy bien así. Pero también es cierto que hay numerosas investigaciones en las que se constata que la escuela diferenciada permite aplicar procesos de aprendizaje efectivos y, al mismo tiempo, ayuda a un mejor desarrollo de la personalidad humana. En el ámbito de la educación no se puede obviar las diferencias entre el hombre y la mujer en muchos aspectos, porque sería renegar de la misma realidad. Por ejemplo, mientras los niños, en general, desarrollan más las capacidades de razonamiento espacial, las niñas desarrollan más las que tienen que ver con la comunicación verbal. Y estas diferencias deben ser entendidas como complementariedad y, por lo tanto, como riqueza para la sociedad.
La educación diferenciada por la que se apuesta en muchos países entre ellos el nuestro, es aquella en la que las chicas y los chicos tienen el mismo curriculum, con idénticas exigencias y medios, pero en aulas separadas por sexos, para ofrecer una educación íntegra adaptada a cada sexo.
Hoy en día, en los países desarrollados, la igualdad de derechos entre hombres y mujeres es un logro social ampliamente asentado, aunque todavía quedan importantes metas por alcanzar, como incrementar la presencia de la mujer en cargos de alta res­ponsabilidad en el sector privado. El modelo de educación diferenciada es también un derecho que debe ser respetado, una opción de libertad. Habrá padres que consideren que para sus hijos es mejor la enseñanza mixta y otros que prefieran la escuela di­ferenciada. Los dos modelos son perfectamente válidos y lo importante es que los padres puedan elegir.

Mayte Dassoy
Pedagogo por la UIB
Artículo publicado en el Diario de Mallorca jueves 5 de julio 2007